Fray Antro: Por fin Anahi en una tarde lluviosa

Por fin Anahi en una tarde lluviosa.

Fervientes y fieles adictos al placer, heme aqui con un relato veridico pasado por agua literelmante hablando, mi tan esperado encuentro sexual con Anahi y otras peripecias dignas de contarse y de saberse.

Un sabado mojado

 

Amanecio lluvioso en la abadia y mientras esperaba que escampara, me prepare con los elementos que siempre llevo a mis encuentros en el templo del placer de Alicia Dolls House, maxime que la tan esperada cita con Anahi ya iba a ser realidad.

 

Terminados los preparativos, me dirigi a la parroquia para atender unos asuntos y sin saber lo que me deparaba el clima, recibi una lluvia torrencial que me dejo muy mal parado; solo alcance a almorzar y tuve que regresar a la abadia a cambiarme, pues mis zapatos, el habito e incluso la sabana santa que llevaba se habian  mojado.

 

No importando este incidente, ya una vez vuelto a lavarme y cambiar de ropa, asi como de la famosa sabana (Elisa la bautizo como el Manto Sagrado), me dirigi al sur para mi encuentro con la exmodelo Anahi.

 

Casa llena

 

Apenas iba doblando la esquina cuando una moto roja llama mi atencion: era Marcus que me estaba esperando. Debo reconocer que iba distraido y al principio no le hice mucho caso, pero cuando vi que me volvia a gritar: “Frayyy!” tuve que regresar unos pasos y ya saludarlo como se debe.

Me informo que me esperaba Anahi (ya eran las 15:00 hrs) y por eso iba presuroso. Agrego casi con pena que estaban ocupadas las habitaciones y habria que esperar unos 20 minutos.

Le dije que no importaba, yo tenia todo el tiempo para mi. Se fue diciendo que iba por un cargador para un radio y yo continue mi andanza.

Entre ya con mas confianza y efectivamente estaba Anahi recostada en el sofa leyendo el Metro; me recibio muy afable, beso de ella en la mejilla y yo en su mano como antiguo caballero medieval.

Anahi al natural

 

Los ojos cansados sonreian, rodeados de ojeras profundas, como si no hubiera dormido desde la Cuaresma pasada.

El rostro limpio, sin gota de maquillaje, surcado de una sombra de cansancio.

Sus labios delgados bostezaban de cuando en cuando.

-“No he comido”

-Como es eso?

-“Tuve un evento temprano, y terminando me fui de compras. Preferi eso a comer. Se me olvido”-, dice a modo de disculpa.

Llamada entrante y ella me pide guardar silencio, yo me voy al WC para no estropear nada. Descubro que han limpiado el bano. Enhorabuena!

Pasan los minutos y por fin sale un chaval como si lo fueran persiguiendo; evidentemente no quiere que le reconozcan o que se yo.

Pasamos ahora si a la capilla azul, ya consagrada por tantas ceremonias del placer impio.

Coloque la sabana santa sobre el colchon, no queria tener contacto con humedades recientes y encendi un par de varillas de incienso.

Bendije el lecho y presencie atonito la desnudez de Anahi.

Talle de palmera, caderas suculentas, trasero amplio y muslos apetitosos.

-“Tengo las piernas flacas”- me dice modesta

Me muestra lo que anduvo comprando y que la dejo sin comer: un short color caki muy corto (le gusta que le vean media nalga me dice muy orgullosa) y una blusita negra. Se va de antro esta noche.

-“No puedo estar en mi casa el fin de semana por la noche, me muero”- confiesa – y tengo que estrenar algo cada vez que salgo”.

 

 

Conociendo a Anahi

 

El primer abrazo desnudo que tuvimos fue inolvidable, apretela contra mi y senti la suavidad de su piel aceitunada, su aroma fresco y los primeros besos de pajarito.

La senti agotada, algo apagada.

Lo atribuyo a su cronica somnolencia, el ayuno o el clima porque estaba triste la tarde; yo me empece a aplicar como buen fraile y empezamos  calentar el  ambiente; ya sin su prenda intima inferior, explore su vulva y me comento que estaba algo reseca y se aplico un gel.

-El chavo que atendi en la manana me lastimo un poco, metia el dedo de una manera muy brusca, le dije pero pues no hacia caso; tiene 22 annos que va a saber.”

Mentalmente maldije al imbecil que la habia dejado tan sensible y de hecho eso marco el devenir de este encuentro,

 

Me dedique a acariciar y besar la piel canela de esta mujer, sobar sus soberbias nalgas y muslos deliciosos, deleitarme con sus senos suaves como malvaviscos; ella me correspondio con un oral de reglamento y antes de que viniera el consumatum est, la abrace de frente y quedo encima de mi. Ahi descubri la causa de su agotamiento.

Mientras estabamos abrazados le empece a masajear la base del cuello y senti los nudos en sus musculos. La falta de sueno y el estress acumulado, la habia puesto en ese estado de postracion. Empece a aplicarme con su espaldita y cada tronido de sus nudos me impelia a seguir masajeando.

 

De repente recorde que traia un par de limones verdes y aprovechando el impulso que ya llevaba, le di un masaje en toda la espalda que la dejo mas relajada; ella misma dijo que se sentia mas ligera y hasta se estiro con mucha alegria que daba felicidad verla en mejores condiciones.

 

-“De haber sabido que sabias dar masajes…”; “eres un estuche de monerias”, se deshizo en elogios con este fraile vanidoso.

Cumplido mi acto de misericordia, recibi en recompensa sus besos y mordiscos que le permiti y vaya que me prodigo con creces en cuello, hombros, pecho… ella ya resoplaba y gemia mientras me ponia al punto de ebullicion; se aplico a otra felatio dulce y por fin me dio acceso a su cavidad, tras colocarme el preservativo que coloco con maestria total.

 

Coitus Light

 

Entro frontalmente y noto un leve rictus en su rostro; le pregunte si le dolia y dijo que no; que solo era una leve molestia.

Por lo visto si la lastimo el infame que la contrato en el mananero.

Busque por todos los medios no lastimarle y con la mayor suavidad posible, logre el coito light con la exmodelo; esta vez si me deje ir antes del tiempo que hubiera querido pero ya estaba el tiempo encima; alcance a llegar a la posicion del doggy style y ante la vision de sus caderas que me saturaron la pupila, descargue mis ansias tanto tiempo contenidas amarrado a su cintura breve.

Bese su trasero voluptuoso y culmine asi mi encuentro con Anahi, modelo de insomnio.

 

EPILOGO

Terminado el santo oficio, despedida de beso carinoso y abrazo fraterno con Anahi, salgo de la capilla azul.

En el vestibulo, me encuentro una cara conocida: es Elisa con palido semblante y cabello desparramado. A su lado, un caballero me mira fijamente y me dice:

-“Fray”?

Yo solo atino a verlo; (este quien es?); la verdad cuando termino mi encuentro con una Doll quedo en estado vulnerable, pues mi capacidad de alerta disminuye notablemente.

-“Fray”?

No le contesto

“-Fray”? _le contesto que si en silencio con un movimiento de cabeza

-“Eres Fray”?

Si, yo soy y  tu quien eres?

-“Soy Fenix”

 

Elisa esta en silencio;

-Que tienes criatura?

-“Me maree; es que no comi”

-Porque haces eso?

-“No me da tiempo”, responde muy a su estilo.

 

Por lo visto, las Dolls no se alimentan. Practican el ayuno.

Sin embargo, yo no les he impuesto tal penitencia, aclaro.

 

Amen.